La Audiencia Nacional ha condenado al expresidente de Pescanova, Manuel F.S.F. a 8 años de cárcel y a otros 11 miembros de la cúpula de la empresa a penas de entre 6 meses y 3 años y medio, por manipular las cuentas de la entidad para poder captar inversores, los cuales finalmente perdieron su dinero.
De los 19 acusados, 7 son absueltos, mientras que los otros 12 son condenados a penas por delitos de falsedad documental, estafa, falseamiento de las cuentas y de la información económica y financiera.
Por su parte, las entidades Pescanova S.A. y BDO Auditores han sido condenadas a multas, que tendrán que satisfacer en concepto de responsabilidad civil, llegando a los 51 millones de euros.
A consecuencia de la crisis de 2008, el presidente de Pescanova, junto con varias personas de confianza, de los departamentos de administración y finanzas, realizaron prácticas irregulares con el fin de seguir manteniendo la financiación bancaria que venían teniendo en años anteriores. Una vez obtenida esa financiación, las prácticas irregulares se sucedieron en las cuentas anuales y otros documentos oficiales “para conseguir unos resultados positivos que no se correspondían con la situación real y, que tras ser oficialmente publicados, permitían captar nuevos inversores y desplazar a la financiación bancaria y sus excesivas comisiones.”
Delito de alzamiento de bienes
Además, la sentencia condena a 2 años de cárcel al expresidente y a 1 año a su esposa Rosario A., ya que sacaron 4 millones y medio de las cuentas de España y lo ingresaron en otras cuentas portuguesas para transferirlas a una cuenta de Hong Kong una vez ya presentadas las querellas y conocidas que las cuentas de la entidad no reflejaban la realidad.
Según la sentencia, de esta forma impedían que parte del dinero prestado estuviera al alcance de los inversores.