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‘Animales y faraones’. El reino animal en el Antiguo Egipto

Última actualización el octubre 6, 2024

Esfinges, estatuas y más de 400 objetos son los que reúne esta exposición en el Caixaforum de Madrid, representando la imagen simbólica que los egipcios daban a los animales, domésticos y salvajes.

El gato y el perro fueron los animales domésticos por excelencia del antiguo Egipto. Dibujos de un perro y un gato bajo la silla de su amo demuestran esta relación. Al fin y al cabo no nos diferenciamos tanto de esta milenaria civilización. 

Los egipcios consideraban a los animales similares a los humanos por su forma de comportarse y por ello se apropian de ellos y les atribuyen una significación. Tanto esculturas como cuadros reflejan ese significado simbólico y religioso que los egipcios dan a los animales.

Perros, gatos y monos eran los animales domésticos más apreciados por los egipcios. Tal era su importancia en la casa, que su muerte producía gran desolación y muchos eran disecados y enterrados junto a su amo. También era común en el Imperio Antiguo (2686-2173 a.C.) hacer representar a sus mascotas en los muros de sus tumbas, estelas y en sarcófagos, algunos de ellos presentes en esta muestra organizada por el Musée du Louvre-Lens y la Obra Social «la Caixa», con la participación excepcional del Musée du Louvre.

Diferentes animales se relacionaban con deidades. Un enorme cocodrilo disecado, presente en una de las vitrinas de la muestra, hace referencia a los dioses Geb y Jentijeti, aunque también fue animal simbólico del dios Sobek.

Gracias a esta exposición podemos conocer muchos detalles sobre la presencia de las mascotas en la vida diaria de los egipcios, desde el ámbito religioso hasta su uso como herramienta de trabajo en la agricultura. Los animales se convierten en fuente de inspiración artística y esto da lugar a  muchos objetos cotidianos como peines, espejillos, figuras de mobiliario, diversidad de abalorios y hasta esfinges o sarcófagos, objetos que podemos encontrar en el Caixaforum de  Madrid.

Piezas con gran detalle que resulta difícil creer que se fabricaron antes de Cristo. Una civilización muy avanzada que no deja de sorprendernos.

Hasta el 23 de agosto de 2015 es posible disfrutar de ‘Animales y faraones’.

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